Mi querido profesor es más vago que sus queridos alumnos, o quizá quiere dar suspense a mi final de carrera, pero el que sufre las consecuencias psicológicas de su anormal comportamiento soy yo (y los que me rodean). Habrá que tener más paciencia que el Santo Job o empezar a hacerse la idea de que las sacará cuando menos me lo espere. En este caso, aumenta un poco cada día mi desesperación, no quiero ir de mártir, aunque espero que este pequeño calvario acabe bien.
Por otro lado, la presentación de McKinsey ha estado muy bien, pero piden un perfil muy alto (el cual no cumplo ni por asomo) y además el trabajo de la consultoría parece que puede irme bien, por lo que el ponente ha explicado. En cualquier caso, le he dado un currículum de los largos (con carta de presentación y todo) por si las moscas. Si estáis interesados, se pueden enviar curriculums a esta dirección: ma.eventos@mckinsey.com (tenéis hasta el 15 de marzo). El proceso de selección es largo y la incorporación sería en septiembre, pero creo que vale la pena intentarlo, ya que parece una buena compañía.
En cuanto a lo de la cena, comida (o desayuno), ese fin de semana no puedo, ya que Anamer tiene su examen práctico de la oposición y quiere que esté con ella. Lo siento por casi todos, pues ya sabéis que no tengo mucha intención en ver a ciertas personas, que durante una larga temporada me han ignorado (laboral y personalmente), y que encima tienen el morro de excluir a otros compañeros de estas quedadas. En cualquier caso pasadlo bien y haced un reportaje gráfico como en la anterior, que estuvo mu bien (gracias Marconato).
Sin más, un saludo a tod@s.
P.S.: Rick, me han llamado los de The Phone House (por fin). Hago la entrevista este viernes. Ya os contaré.
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